Europlátano agradece el esfuerzo y compromiso de sus trabajadores

Hace ya 6 semanas que nuestra vida cambió por completo. En los centros de trabajo de Europlátano hemos ido adaptándonos a las circunstancias, primando la seguridad de nuestros trabajadores por encima de todo, ellos y nosotros somos uno. Somos conscientes de la responsabilidad que tenemos trabajando en estas circunstancias para que todos los hogares españoles puedan disfrutar de unos plátanos que ahora son más importantes que nunca. Por sus cualidades, el plátano se ha revelado como la estrella de la alimentación en estos momentos. Asequible para el consumidor y con unas innegables características alimenticias, es ahora fundamental en una España que atraviesa la peor crisis desde la guerra civil.

Desde el primer momento se configuró un protocolo preventivo frente al COVID-19 que pone la protección de nuestros trabajadores como elemento central de nuestra empresa, un protocolo que vamos modificando y mejorando día a día. Ha cambiado la forma de trabajar y de relacionarnos, transformando los abrazos de la mañana en guiños detrás de una pantalla protectora y atisbando lo que parece una sonrisa detrás de las mascarillas.

Ese gran equipo de trabajo con el que contamos ha puesto lo mejor de sí mismo, y ese esfuerzo y compromiso Europlátano quiere y debe recompensarlo. En estos momentos de incertidumbre ante el futuro, hay que ir más allá de pequeños gestos, por lo que nuestro Consejo de Administración ha acordado, reflejando la voluntad unánime de nuestros socios, gratificar económicamente a los más de 350 empleados que forman Europlátano. Es una forma de reconocer el trabajo que ha realizado todo el equipo y su capacidad para adaptarse a las nuevas circunstancias, que consideramos ha sido ejemplar.

Somos conscientes de que, comparándonos con otros sectores, nos encontramos en una posición privilegiada, ya que afortunadamente la agricultura no se detiene. Por ello, creemos que es el momento de aportar nuestro grano de arena a una sociedad que tanto nos necesita, a los que se dejan la piel para protegernos y a los más vulnerables en esta crisis.

Para que los sanitarios pudieran seguir cuidándonos, hicimos acopio de todo el material de protección del que disponíamos en las tiendas agrícolas y, apelando a la solidaridad y generosidad de los agricultores, organizamos una campaña de recogida de trajes protectores, gafas, mascarillas y guantes que se entregaron a diversos hospitales de Canarias. Por otro lado, hemos realizado donaciones de fruta y material de limpieza a la Cruz Roja, Banco de Alimentos, ayuntamientos, residencias de mayores, hospitales, Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y centros de rescate de animales.

Esto es solo el principio, porque desgraciadamente queda un largo camino por recorrer. El entusiasmo de estos primeros momentos no puede decaer y para ello necesitamos una empresa que siga haciendo del compromiso social un objetivo ineludible. En efecto, Gabaceras, gracias a un intenso esfuerzo, se ha convertido en la marca líder del mercado peninsular y ahora más que nunca debemos hacer de ella un referente de la producción nacional y un elemento imprescindible de la alimentación de nuestras familias que genere unos beneficios que reviertan en nuestra sociedad. Seguiremos demostrando el valor de este equipo humano: los agricultores desde las fincas, los trabajadores en los empaquetados, los técnicos, el personal de administración, el equipo informático, la red comercial; con el objetivo de seguir trabajando para abastecer al mercado de la mano de nuestros clientes, apostando por el producto local, protegiendo a nuestros trabajadores y aportando a la sociedad que confía en nuestra fruta.